

Referencia:
Una de las obras capitales del gran escritor beat, en la que relata su descubrimiento del budismo y de su primera ley, «la vida es sufrimiento», durante los años en que se sentía fracasado por no encontrar editor. Ambientada en California, en la novela aparecen retratados, con otros nombres pero muy reconocibles, desde el propio Kerouac hasta Allen Ginsberg, Laurence Ferlinghetti o Gary Snyder.
En este libro catártico, Samuel Shem combina su experiencia como médico y su talento para la más negra comedia del absurdo. Roy Basch, el narrador y protagonista, y sus compañeros, son brillantes licenciados de las mejores facultades de medicina, que han conseguido ser aceptados para hacer su año de prácticas en uno de los más prestigiosos hospitales, la Casa de Dios. Y en este año, se multiplican los episodios de aprendizaje de la medicina pero también del horror, la impostura, el cientificismo más cruel e ineficaz y, sobre todo, de lo ineludible de la enfermedad y la muerte. Pero son jóvenes, y aun en medio del horror la vida proclama sus derechos, y es así como el sexo y las orgías con las enfermeras alcanzarán dimensiones épicas...
Cuando la vieja imprenta local en la que Felipe Díaz Carrión llevaba media vida quebró, él se quedó sin trabajo y sin posibilidades de conseguirlo. Era la época en que se emigraba a las industriosas poblaciones del norte. Su hijo tenía nueve años, y no había día en que Asun, su mujer, no le pidiera a Felipe que se marcharan. Así que cerraron la casa y se fueron al norte. Felipe trabajó pri-mero en la construcción, y después en una fábrica de productos químicos. Tuvieron otro hijo, se compraron otra casa, y pasó el tiempo, y la vida los cambió. Porque algunos de los miembros de la familia -el hijo mayor y Asun, que quizá no soportaban ser para siempre los otros, los charnegos- no pudieron sino sucumbir a las obsesiones de identidad y afirmación
Una de las obras capitales del gran escritor beat, en la que relata su descubrimiento del budismo y de su primera ley, «la vida es sufrimiento», durante los años en que se sentía fracasado por no encontrar editor. Ambientada en California, en la novela aparecen retratados, con otros nombres pero muy reconocibles, desde el propio Kerouac hasta Allen Ginsberg, Laurence Ferlinghetti o Gary Snyder.