¿Por qué es divertido el sexo?
Yo,mi,me...contigo
Una mujer difícil
Un siglo después de Darwin,...
Tuyo es el reino
Tus ganas de vivir me...
Todo lo que se llevó el diablo
Temas e intérpretes flamencos
Sputnik, mi amor
Del mismo modo en que, en el viaje del satélite ruso Sputnik, la perra Laika giraba alrededor de la Tierra y dirigía su atónita mirada hacia el espacio infinito, en Tokio tres personajes se buscan desesperadamente intentando romper el eterno viaje circular de la soledad. El narrador, un joven profesor de primaria, está enamorado de Sumire; pero ella, quien se considera la última rebelde, tiene una única obsesión: ser novelista. Sumire conocerá a Myu, una mujer casada de mediana edad tan hermosa como enigmática, y juntas emprenderán un viaje por Europa tras el que nada volverá a ser igual.
Soños eléctricos
Sombras
Sombras
Sobre o dereito a unha...
Sherlock Holmes contra...
Se alquila una mujer
Satanás
San Leibowitz y la mujer...
SADE Una inocencia salvaje...
Rusos
Reencuentro con el señor Bello
Recuperar la democracia
Primera fuga
Pisando los talones
Picardías de la Belle Époque
Partes iguales de vértigo y...
Panificadora
Otra vuelta de tuerca
Otra vez el mar
Os lalinenses en América
Oliver Twist
Ojos negros
Obxectos antigos de orixe...
O sol do verán
O espido de Gina
Nuevas noticias del señor...
Nuestros antepasados
Noche sobre noche
No ventre do silencio
No soy un libro
Narradores de la noche
Middlesex
Memoria
Memorabilla/Drama...
Medianoche en el Jardín del...
Martin Bauman
María, reina de Escocia
Lume de cobiza
Lucio el anarquista...
Los sueños de Lincoln
Los Niños Sukhavati
Los detectives salvajes
Los conejos sabios
Los caballos ibéricos
Los años con Laura Diaz
London
Lola patas arriba otra vez
LETRAS ANDALUZAS Estudios...
Las puertas de lo posible
Las antiparras del poeta...
La vida sale al encuentro
La venganza de los niños-cucú
La quinta Ola
La piel afilada Un...
Un experimento literario con ecos de Borges, Calvino, Lee Masters, en el que Josan Hatero en escogidas y precisas -afiladas- palabras nos hace disfrutar tanto como a los amantes que retrata. «Después del sexo ya no eres igual, ya nada puede ser lo mismo.» Éste es un catálogo de amantes. Desde los exploradores a los que aman a oscuras; de las mujeres submarinas a los coleccionistas; ajenos, suicidas, invisibles, enfermos, pornógrafos, santos o sonámbulos, todos son abducidos por el mismo y común denominador: el deseo. Lúbricos y lúdicos, discursos amorosos y confesiones de invierno, La piel afilada ofrece grandes posibilidades de viajar. Cada pocos textos cabría respirar hondo, pensar, puede que cerrar el libro. Y esperar a otro día.